1.20.2012

A veces creo que no merece la pena

Sé que en los tiempos que corren, es muy difícil salir adelante, y lo es para todos, pero para los que nos hemos lanzado a la piscina y hemos apostado por crear nuestros propios trabajos, lo es especialmente, y seguro que todos los que lo habéis hecho, sabéis de lo que os hablo. Hay noches que no puedes dormir, porque no tienes nada seguro, apenas puedes pasar tiempo con tus hijos, porque el 90% de tu tiempo se lo lleva tu trabajo, te olvidas de lo que significa la palabra vacaciones, lidias a diario con la administración y su cruel sentido de la responsabilidad, sabes que si por lo que sea, y pese a todo tu esfuerzo la cosa no funciona, te vas a la calle sin nada, sin paro, sin ayudas, pese a pagar como todo el mundo tus cuotas a la seguridad social. Pero pese a todo, te levantas ilusionado, porque crees en lo que haces, crees que de alguna manera sirve para algo, y sigues cada día echándole imaginación y la más bonita de tus sonrisas. Tratas de ser justa, amable, divertida... tratas de ser buena. Siempre.
Pero de repente, te encuentras, con que a todo eso, le sumas que hay personas que consideran que tu esfuerzo no vale nada, y que si tu te despistas un momento, eso les da razones para llevarse tus cosas y quedarse tan anchos.
Vas a ver cuantas prendas te quedan para las rebajas, que cada día llegan antes, y que además tienes que competir contra los suculentos 70% de descuentos de los grandes almacenes, y ves que faltan cosas. En mi cara, con todo el descaro, delante de mi bebé y de mi mejor de las sonrisas, alguien considera, que se puede llevar mis cosas por nada, porque sí, porque quiere, porque se le antoja. Igual piensan que es picaresco, igual les sube la adrenalina, igual llegan a su casa orgullosos a vestir a sus hijos con algo que ha pagado con muchísimo esfuerzo una desconocida, y se quedan tan felices. Pero es tan cruel como robarle la cartera a un anciano. Como atracar en un cajero. Como quitarte el bolso en el metro.
Se, que la mayoría de los que vais a leer esto, estáis de mi parte, y no sois la o el malnacido que me lleva robando alegremente toda la temporada de invierno, pero espero que entendáis, que a partir de ahora sea más desconfiada, esté más pendiente de ti cuando estés mirando tranquilamente y seguro que sin ninguna mala intención, mis colecciones, y entiendas que llene la tienda de cámaras de seguridad y encadene toda la ropa.
Lo siento. No me gusta nada, pero no me queda otra.

7 comentarios:

  1. Vaya, lo siento mucho. Yo estoy dispuesta hasta a dejarme registrar, si es necesario. No te preocupes, y espero que no vuelva a sucederte más. Ánimo

    ResponderEliminar
  2. Estas en todo tu derecho... yo te entiendo.
    Animo y fuerza

    ResponderEliminar
  3. Venga ánimo! si es lo que tienes que hacer, el que aprecia tu trabajo lo entiende seguro ;)

    ResponderEliminar
  4. Hola guapa!
    Es una pena que tengas que llegar a esos extremos en una tienda como la tuya, pero como clienta ocasional te diré que te entiendo perfectamente, a quién no entiendo es a quien te está robando en las narices.
    Un beso y mucho ánimo

    ResponderEliminar
  5. Siento que te encuentres desanimada, pero que sepas que lo entiendo y estás en tu derecho en tomar las medidas oportunas.
    Un saludo, Maria

    ResponderEliminar
  6. Hola Maria,
    soy Elena, de la tienda LOTTA de Barcelona y quería decirte que me ha gustado mucho lo que has escrito, que yo también he vivido lo mismo delante de mis narices y que muchas veces me han dado bofetadas por ser tan iungenua y confiar en la gente. A pesar de todooooo, me niego a desconfiar y creo que el que la hace, la paga....necesito seguir creyendo en la gente!! Me gusta mucha tu tienday tu fiosofia.

    ResponderEliminar