Nuestra escapada a Asturias

La semana pasada escapamos unos días al campo. Y fue algo maravilloso y necesario; la naturaleza, nosotros cuatro, el tiempo -24 horas sin nada más que hacer que estar juntos- y Asturias, fantástica región donde las haya.
Así fueron nuestros días:

Stravinski, Aníbal y ¡glück!

La Consagración de la Primavera es como Igor Stravinski tituló a al ballet cuya música compuso y que coregrafió Vaslav Nijinski, y que se estrenó en París el 29 de mayo de 1913. El ballet tenía dos actos, y, aunque los pitidos comenzaron en la introducción del primero; en el segundo, hubo que contener a un público enfurecido, que al no ser capaz de entender esta revolucionaria y extrañísima obra, se sintió ofuscado y timado ya que, acostumbrados como estaban a los ritmos de los románticos, en aquello sólo veían un montón de ruidos estruendosos.
Pero no sólo fue la música, violenta y disonante, la que molestó a gran parte del público. La coreografía de Nijinki tampoco gustó; los bailarines de movían toscamente, metían los pies para dentro, y realizaban movimientos que resultaban indecorosos para la época. Al final de la obra, hubo quienes pitaron y abuchearon, mientras otros, aplaudían frenéticamente, conscientes de estar ante una obra con un lenguaje único y tremendamente vanguardista. La tensión llegó hasta el punto de tener que desalojar a algunos espectadores por haberse liado a puñetazos. Tal cual.
Lo que pudieron ver aquellos exacerbados parisinos fue esto:



Y es precisamente en la imaginería folk rusa de Stravinsi y Ninjinski en la que Aníbal se ha inspirado para hacer nuestra pizarra de temporada.Y a mi me parece una monada.

Sólo quedan un tres días para que quitemos todo lo que huela a invierno en la tienda. Nuestro sentir es ya completamente primaveral y como en el ballet de Stravinski nos consagramos a ella, nos entregamos a la nueva estación bailando aunque aquí, eso del sacrificio de la doncella, nos lo saltamos.

FUB, Munster Kids y segundas rebajas

Y mientras en el norte la megaciclogénesis se carga mobiliarios y puentes de nuestra muy bella costa cantábrica, aquí, en Madrid, el frío no da tregua; a veces se presenta en forma de sol y cielo azul, otras en forma de nieve y otras de aguanieve, dando paso a los atardeceres más impresionantes que se pueden ver en todo el año.
Los días cada vez duran más, y este fenómeno de la luz, nos va avisando humildemente, de que el verano se acerca. Pero sí,  ahora mismo, hace un frío del carajo.
Aunque lo que a mi me llena de ganas de verano son las nuevas colecciones, que ya van entrando triunfales y con ese desparpajo que sólo tienen los colores y estampados de primavera/verano.
Las últimas dos marcas que hemos recibido son dos veteranas. FUB y Munster Kids.
Los daneses -FUB- siguen, sin defraudar, en su línea. Ropa cómoda, con cortes sencillos y fáciles de entender y sus ya famosas rayas en perfectas combinaciones de colores. Todo esto sobre el algodón más fino y extrafino que os podáis echar a la cara (o al cuerpo, en este caso).

 

Los australianos Munster Kids visten a niños y niñas atrevidos, molones, chulos, aventureros. Ropa hecha para molar, para ir en bici o patinando, para bailar, para ir a la playa o jugar en medio de la calle. También en su línea, en la propuesta para esta primavera verano destacan las islas paradisíacas al atardecer y el mix de ilustraciones y estampados. Ahí un video bien mono que se han marcado:

Munster S14 Range from munsterkids on Vimeo.
Y mientras sigue el goteo primaveral y veraniego, y como todavía hace un frío que pela, seguimos con nuestras rebajas invernales, pero mejores, vaya que ya prácticamente todo lo que nos queda está un 50% rebajado. Aprovecha ahora para comprar el abrigo del año que viene (si ves que el de este año ya le queda justo), compra ese vestido con el que te habías encaprichado un poquito más grande, compra esa sudaderilla o ese peto de manga larga pero de algodón, para tu bebé, que luego en verano siempre hay días que refresca por la noche y nunca está de más tener algo que tape un poco más...
Lo que sea, pero venid, que me quiero deshacer de todo invierno y he de dejar paso a la primavera.
Aquí Manuela y Rita os lo recuerdan